Mi jugo favorito de la vida es el naranja-zanahoria. Me compro a luca y a mil en los carritos cerca de mi oficina y realmente me hacen el día. Mi postre rápido favorito es plátano con jugo de naranja. Me acuerdo de cuando era chica y lo amo con pasión.
Desde hoy mi pie favorito es el plátano-zanahoria-naranja.
Este pie es parte de un desafío: crear recetas con los plátanos negros, esos que en el supermercado tiran a la basura y que nadie los quiere a los pobres, pero no saben que son lo mejor para cocinar. Son tan dulces y cremosos que sustituyen perfectamente a cualquier tipo de azúcar o endulzante. Sirven para jugos, queques y para hacer esta receta increíble.
Para la masa:
- 1 taza de harina integral
- 1/2 taza de azúcar rubia
- 50 gramos de mantequilla recién salida del refrigerador
- 1 huevo
- 1 cucharadita de vainilla
- Procesar hasta tener una masa. Poner en su molde favorito, previamente enharinado y hornear a 170 grados por 15 minutos aprox.
Para el relleno (hermoso, delicioso y cremoso)
- 2 zanahorias grandes
- 1 anís estrellado
- 2 cucharaditas de canela el polvo
- 2 plátanos maduros grandes (3 pequeños)
- Jugo y ralladura de 1/2 naranja
- 2 cucharadas soperas de maicena (o almidón)
- Cocinar las zanahorias, previamente peladas, desde agua fría con el anís y la canela. Dejar cocer hasta que estén blandas y listas para hacerlas puré.
- En la juguera o máquina procesadora agregar los plátanos, jugo y ralladura de naranja y la zanahoria cocida sin líquido. Procesar todos los ingredientes y agregar las cucharadas de maicena. Procesar hasta integrar.
- Distribuir el relleno sobre la masa previamente horneada y volver al horno a 180 grados por 12 minutos o hasta que vean que el relleno está firme y más oscuro.